jueves, 1 de abril de 2010

Felices Pascuas

En la historia del mundo, hubo un hombre cuyo paso liberador aun perdura en nuestras vidas. Él nos dejó su ejemplo de lucha, misericordia y amor.

En esta fecha tan especial rescatemos su ejemplo de vida reavivando la llama del compromiso y el trabajo conjunto. Quienes hacemos Grupo Feedback brindamos nuestro aporte, para que juntos logremos el futuro que anhelamos.

Felices Pascuas.



lunes, 29 de marzo de 2010

Como Financiar Una Campaña Política

Al abordar este tema, lo primero que la gente pregunta es ¿Cuánto cuesta una campaña?… Y esta es una pregunta que no tiene una sola respuesta. Tiene tantas como campañas existan. Cada campaña es distinta y en consecuencia su costo es diferente.
Cuando hablamos de financiamiento de campañas, lo fundamental es tener en cuenta que ésta es una de las áreas más complejas de una campaña; así como también excepcionalmente delicada e importante. Tengamos en cuenta que muchos candidatos llegaron por contar con los recursos necesarios, lo que significa que el éxito de una campaña esta íntimamente relacionado con la disponibilidad de recursos para ejecutar las estrategias.Una campaña bien ordenada exige de un presupuesto previo. Es muy negativo para los objetivos de la campaña empezar con recursos y a los 30 días no contar con ninguno, por lo que el candidato y su equipo deben determinar vía presupuesto un costo estimativo de toda la campaña. Son ellos quienes conocen mejor que nadie los compromisos que deberán atenderse.
Enumerar los rubros que determinan el costo de una campaña puede ser fácil pero siempre será incompleto. Pero es importante considerar de entrada los siguientes puntos:

Giras del Candidato (movilidad, hoteles, comidas, etc.)
Apoyo Logístico a Candidatos Regionales.
Publicidad, Encuestas, Servicios de Prensa.

Y una innumerable cantidad de otras variables que es bueno conocer de antemano aunque sea de forma estimada.

A partir de la elaboración de este presupuesto el objetivo principal del equipo encargado de la recaudación debe trabajar para conseguir los recursos colocándose una meta y no detenerse hasta haberla logrado. Y como dijimos anteriormente este es un tema delicado porque nunca las partes involucradas blanquean la cuestión. Y existen razones para ello aunque sean cuestionables, ya que la mayoría de los contribuyentes de campaña prefieren permanecer en el anonimato. Por lo que sólo resulta conocida la participación que a cada partido le corresponde vía Ministerio del Interior.

Sin embargo, lo que acá nos interesa es plantear alternativas para lograr recursos fuera de los consignados y retomando lo que dijimos anteriormente trabajar con toda la fuerza en bien en este rubro es fundamental, ya que aquellos candidatos con buenos recursos son los que finalmente tienen mejores posibilidades.

De todo esto se entiende que es fundamental tener un encargado de finanzas, a pesar de que este es un tema del cual candidato no puede desvincularse; para ser más enfático, soy de la firme opinión que el candidato debe estar involucrado en la recaudación. De hecho parte de su tiempo lo tiene que dedicar a esto, aplicando 2 conceptos básicos:

Siempre debe pedir más de lo que presume que le van a dar.
Con buen manejo debe pedir de nuevo.

Para esta tarea es fundamental contar con un buen banco de datos. Se hace indispensable un manejo eficiente de la información para saber quienes aportaron en campañas anteriores, con el objetivo de agradecerles, recordarles y volver a pedir. La forma más usual es a través de una comunicación previa, tipo mailing, para luego acudir al contacto personal.

Otro punto que se debe tener en cuenta en materia de recaudación de fondos es el egoísmo de la gente, por lo que la estrategia más adecuada es empezar pidiendo colaboración a los amigos y seguir después con quienes quieren ser nuestros amigos. Sin olvidar que todo esto debe estar sustentado por argumentos que nos sirvan de apoyo.

Como dijimos anteriormente el candidato debe involucrarse de manera directa, él es quien debe establecer puentes con los contribuyentes más importantes, en este punto su participación es vital, y mucho más si tenemos en cuenta que el primer 25% es el más difícil de conseguir.

En una estrategia posible de recaudación hemos marcado a los amigos como paso inicial. Después habrá que cubrir un universo mucho más amplio y heterogéneo. Para alcanzarlo es conveniente dividir a los posibles contribuyentes en grupos: por capacidad económica, por actividades, por afiliación, etc. y colocar a un responsable al frente de cada grupo

Para dirigirse a los potenciales contribuyentes lo más efectivo es hacerlo de manera emotiva; cuanto más emotiva, mejor; hay que conmover al contribuyente; por lo que sería una buena táctica agregar al mailing una foto del candidato especialmente dedicada y no olvidarse nunca de decir “gracias”. La gente que aportó, nunca se olvida de que se lo agradecieron por lo que cuanto más aportan más personalizado debe ser el agradecimiento.

Siendo el tema del pedido de contribuciones una cuestión tan delicada, es importante que quienes colaboren con el candidato sean personas influyentes, con cierta autoridad. La gente que día, debe saber, debe sentir que aquel con quien trata es influyente, aún después de la elección. Aunque todos los donantes son importantes, una práctica corriente, nada desdeñable, es que quienes más dan tienen más fácil acceso al candidato.

Algunas formas tradicionales de recaudación sin contar con las consignadas pueden ser las siguientes:
Organizar eventos de poco dinero. Registrar la concurrencia, solicitar sus aportes y después llegar a ellos en forma directa y solicitarles un esfuerzo adicional.
Hacer reuniones familiares. No más de diez personas a las que debe asistir gente importante del partido. Multiplicar este tipo de reuniones. Hacer participe a los invitados de “comidillas” de la campaña. Deslizar datos presumiblemente confidenciales; convertirlos en confidentes de algunos datos reservados.
Realizar eventos de envergadura; en lugares atípicos; una quinta, una embarcación. Deberán ser entretenidos y contar con la presencia de famosos: deportistas, actores, cantantes, etc. Tratar incluso que asista gente apolítica pero de militancia en actividades importantes de otra naturaleza como empresarios, miembros del clero, etc. Si el candidato no está presente, tratar de comunicarse con él vía satelital y plantear el diálogo con los presentes.

En estas reuniones se debe aprovechar de ir dando a conocer las cifras de las encuestas resulta un elemento de seducción. Lo importante es lograr que se cree el clima de que “estamos apoyando al ganador”.

Las reuniones menores suelen servir para un contacto más directo con el contribuyente, ello facilita que se lo pueda hacer confidente acerca de cómo lo va a favorecer la política del candidato; y esto no tiene nada de incorrecto. Quienes a-portan, el día de mañana quieren levantar el teléfono y hablar con el candidato o su gente.

Hay otra fuente de recursos: la de la gente que simplemente cree en el candidato. Es gente que no tiene ninguna posibilidad de acceso al mimo pero lo apoya. Es gente que por lo general dispone de sumas pequeñas, pero muchos que ponen poco, pueden su-mar mucho. A esta gente hay que llegar vía mailing con el mensaje más emotivo posible. La clave, a veces, está en tratar de analizar el egoísmo de la gente transformado en interés por involucrarse de alguna forma.

Establecido el vínculo con el contribuyente por cualquiera de los sugeridos hay que seguirlo. Se debe pedir una vez pero se puede volver a pedir una segunda vez. La campaña es un proceso continuo, por lo que hay que estar siempre cerca de la gente.

Por Mauricio Jaitt – Argentina

Fuente: http://www.centropolitico.org